Sanjurjo Badía, nace en Sada (A Coruña) en el año 1837. Su padre poseía un taller, así como una relojería en la villa coruñesa en la que comenzó a trabajar con muy corta edad y en la que instaló años después una fundición. Emigra a Cuba en 1854 donde con un socio andaluz monta un taller de calderería de cobre. Sanjurjo sin embargo quiere regresar a España, y seis años después vende a su socio su participación y cruza el Atlántico llegando a un bullicioso y muy indistrial Vigo, que lo cautiva fijando ya su residencia en la ciudad olívica, donde adquiere los viejos talleres de “Ortega y Baamonde” (La Fundidora) a los que les cambia el nombre, por lo que sería su empresa y la de sus descendientes: La Industriosa. La industria estaba situada en la Calle García Barbón actual, muy cerca de donse se instalaría la Fábrica de Cervezas la Barxa y la Artística. Entre sus trabajos destaca en aquellos lejanos años, la creación y construcción de su particular submarino, expuesto actualmente en el Museo del Mar de Vigo, que tenía una pileta con paredes transparentes, para poder observar la fauna y la flora marinas.
Su genialidad y originalidad fue premiada por Alfonso XII, que le concedió la Gran Cruz de Carlos III. Es conocida su gran amistad con el genial Julio Verne que se acercó en varias ocasiones a Vigo para mantener con él reuniones o simplemente días de esparcimiento. Es obvio que este gallego genial influyó en el escritor francés en sus conceptos de la navegación submarina del futuro e incluso Verne citó a Vigo en alguna de sus obras, en las que hizo referencia a la Batalla de Rande. Sus yates “Saint Michelle” fueron reparados en sus talleres y varaderos vigueses.